El continente antártico está rodeado de un inmenso, continuo y dinámico volumen de agua: el Océano Austral, cuya superficie representa el 15% de la superficie total de los océanos del mundo.
Su límite norte, presenta características muy particulares tanto en el aspecto físico como biológico, es la Zona de la Convergencia Antártica, o Frente Polar Antártico. En esta zona, las aguas frías y menos salinas que fluyen hacia el norte desde la Antártida se encuentran con las aguas subantárticas más tibias que fluyen hacia el sur desde los océanos Atlántico, Indico y Pacífico. Aquellas aguas que rodean las islas situadas en el frente polar antártico, o cerca de él (Islas Macquarie, Kerguelén, Crozet y Príncipe Eduardo) se consideran en general parte del Océano Austral.
El estudio de las aguas del océano Antártico es de enorme interés para la ciencia. La gran masa de agua que rodea a la Antártida influye sobre lo que se denomina el océano global al aportar corrientes de agua fría muy ricas en nutrientes y modificar así las caracterísicas físicas, químicas y biológicas de todos los mares.
A fines del siglo XIX, cuando sucesivos congresos científicos convinieron en la necesidad de estudiar las regiones polares, (las últimas áreas de la Tierra que todavía quedaban al margen de la investigación) se preparó un proyecto científico que estaría a cargo de las naciones más adelantadas de la época. Tal vez de aquellas tareas, lo que más trascendió fueron las expediciones terrestres, la llegada al Polo Sur, el descubrimiento de cordilleras, de islas, de inmensas llanuras de hielo. En cambio, las expediciones oceanográficas a los mares antárticos tuvieron un segundo lugar, posiblemente por su naturaleza más técnica, y por lo especializado de la información buscada.
La exploración del Océano Austral comenzó hace en el siglo XVIII con la caza del lobo fino que llegó a producir el casi exterminio de sus poblaciones.
En el siglo XIX comienza la caza del elefante marino, de la ballena franca (Eubalaena australis) y de algunas especies de pingûinos subantárticos. La caza del rorcual aliblanco y del cachalote comienza en el siglo XX; en esta época se realiza una explotación limitada de elefantes marinos macho. Se lleva a cabo además la caza exploratoria de focas del campo de hielo y comienza la pesca de peces y de krill. Luego se iniciará la pesca exploratoria de centollas y calamares.
El Océano Antártico, definido como los mares que quedan encerrados al sur de la Convergencia Antártica, tiene aproximadamente 38.000.000 de km2. Por ello es una enorme unidad geográfica que justificó los viajes realizados por los buques "Challenger" (1872-1876; "Belgrica" (1897-1899; "Valdivia" (1898-1899); "Gaus" (1901); "Antártic" (1901-1903); "Scotia" (1902) y muchas otras naves.
El Océano Austral está constituido por varias cuencas profundas separadas entre sí por tres grandes cordilleras mediooceánicas: la cordillera de Macquarie, situada al sur de Nueva Zelandia y Tasmania; la cordillera de Kerguelén-Gaissberg. situada alrededor de los 80°E y la cordillera de Escocia, o el arco de Escocia, que se extiende en dirección este en forma de arco desde la plataforma sur de la Patagonia hasta las islas Shetland del Sur y la Península Antártica. La plataforma continental es angosta, excepto en algunas partes de los mares de Weddell, Ross, Amundsen y Bellingshausen y sólo representa entre un 3 y un 5% del área total del Océano Austral.
El Océano Austral está constituido por varias cuencas profundas separadas entre sí por tres grandes cordilleras mediooceánicas: la cordillera de Macquarie, situada al sur de Nueva Zelandia y Tasmania; la cordillera de Kerguelén-Gaissberg. situada alrededor de los 80°E y la cordillera de Escocia, o el arco de Escocia, que se extiende en dirección este en forma de arco desde la plataforma sur de la Patagonia hasta las islas Shetland del Sur y la Península Antártica. La plataforma continental es angosta, excepto en algunas partes de los mares de Weddell, Ross, Amundsen y Bellingshausen y sólo representa entre un 3 y un 5% del área total del Océano Austral.
Video: Aprovisionamiento Base Marambio-Campaña Antártica 2017/2018 ©Gaceta Marinera
El Océano Antártico es la fuente de formación de la mas densa masa de agua del planeta que circula por el fondo oceánico extendiéndose a lo largo de los tres océanos hasta latitudes medias del Hemisferio Norte: el Agua de Fondo Antártica.
Durante el invierno cuando el mar comienza a congelarse, el agua se torna más salina y fría y por lo tanto más densa, hundiéndose hasta grandes profundidades para circular hacia el norte por debajo de aguas menos densas.
La medición de temperatura y salinidad es imprescindible para el cálculo de la densidad y para identificar las distintas masas de agua existentes a lo largo de la columna de agua, como así también su procedencia.
El conocimiento del campo de densidad a través de la medición de estos parámetros, juntamente con las mediciones directas de corrientes, nos permite conocer la circulación oceánica.
La temperatura, la salinidad del agua, su curiosa disposición en corrientes profundas y superficiales, la posesión de una fauna propia y rica confirman que el Océano Antártico es una unidad oceanográfica independiente, no simplemente un cierre austral de los océanos Indico, Atlántico y Pacífico.
Las características dominantes del Océano Austral son:
1) la Corriente Occidental de Deriva, es decir, la corriente circumpolar antártica que fluye de oeste a este en el norte.
2) la Corriente Oriental de Deriva, que va hacia el oeste cerca del continente antártica y se divide en una serie de giros y remolinos en el sentido de las agujas del reloj, como por ejemplo, el giro del mar de Weddell.
Se pueden distinguir tres zonas de importancia ecológica en el océano Austral:
1) la Zona sin hielo: situada entre el Frente Polar y el límite norte del campo de hielo en invierno.
2) la Zona intermedia del campo de hielo estacional: situada entre los límites septentrionales del campo de hielo en invierno-primavera y en verano-otoño.
3) la Zona Antártica de Alta Latitud o zona de hielo permanente: adyacente al continente antártico.
La más productiva de las tres es la zona del campo de hielo estacional donde predomina el krill (Euphausia superba), organismo plantónico que constituye la dieta básica de numerosos cetáceos, focas, aves y peces. Tradicionalmente se ha considerado sencilla la cadena alimentaria antártica, no obstante, se ha logrado reconocer la complejidad de los procesos demográficos del krill ocurren a nivel de cuenca oceánica sobre los que influyen fuertemente factores abióticos que ocurren en gran escala (por ejmplo, la cubierta de hielo y los giros marinos).
CONVERGENCIA ANTÁRTICA:
El Frente Polar o Convergencia Antártica es el área donde se encuentran Aguas de superficie Antártica con Aguas de superficie Subantárticas. La primer masa de agua se hunde debajo de la segunda, menos densa, y circula hacia el norte a mayor profundidad. Se distingue en superficie por una disminución repentina de la temperatura del agua de mar cuando se navega hacia el sur.
Mediciones con sensores infrarrojos desde satélites han permitido determinar varianciones de temperatura superficial de hasta 5°C en 20 kilómetros.
Se ubica entre los 50 u 60° de latitud Sur, alrededor de todo el continente Antártico, definiendo el océano Antártico al sur. Este límite que separa los tres océanos Atlántico, Pacífico e Incido del océano Antártico, no es un límite físico sino oceanográfico que divide al océano Austral en dos regiones: Antártica y Subantártica, cada una con características propias. Su posición sufre variaciones temporales, habiéndose determinado desplazamientos de dos grados de latitud a lo largo del año y hasta cuatro grados durante períodos más largos.
La posición de la convergencia Antártica, se encuentra influenciada por la presencia de las masas terrestres y la forma del suelo marino. Por ejemplo, entre Sudamérica y la Península Antártica está restringida a pasar por el pasaje de Drake, por lo tanto no se producen allí grandes desplazamientos; al salir del pasaje, desvía su curso para pasar al norte de las islas Georgias del Sur. Si comparamos las condiciones climáticas, flora y fauna entre Tierra del Fuego, al norte de la convergencia y las islas Georgias del Sur, al sur de la misma en la región antártica, inhóspitas y con escasa vegetación, tenemos un claro ejemplo de la importancia de este límite, fundamentalmente teniendo en cuenta que ambas áreas se hallan a la misma latitud.
BIBLIOGRAFÍA:
- Argentina en la Antártida. Dirección Nacional del Antártico. Instituto Antártico Argentino
- Hacia una mejor comprensión del concepto de ordenación de la CCRVMA. Karl Herman Kock.Mayo 2000
Lic. Dora E Gerez
Proyecto Antártida
Docentes
Escobar - Pcia Bs As.
Argentina