RESCATE AL MAGDANELA OLDENDORFF - INVIERNO 2002


Nuestro País tiene una rica historia relacionada a los rescates en el Continente Blanco, esta es una parte de nuestra historia de rescates:


OPERACIÒN CRUZ DEL SUR 

AÑO: 2002





Rusia tiene varias bases en la Antártida, una de ellas es NOVOLASKA RESKAYA perteneciente al Instituto Antártico de la Universidad de Moscú.

Esta BAse está ubicada en la Latitud 70º 46´S  Longitud 11º 50´ E, prácticamente al sur de Sudáfrica.

Como todos los años, el Instituto Antártico Ruso, planificó el relevo y reaprovisionamiento de sus bases, contratando para esta tarea al buque MAGDALENA OLDENDORFF.

El buque pertenece a la empresa Oldendorff, que posee 187 unidades en todo el mundo, es alemán, con bandera de conveniencia de Liberia, el Capitán es ruso, el Segundo ucraniano y la tripulación filipina, india y alemana, siendo apoyado por una empresa Sudafricana.

El buque durante los meses de diciembre y enero había sido contratado por el gobierno de la India para abastecer sus bases y en febrero/marzo debí cumplir con el gobierno ruso.


Las características del Magdalena Oldendorff son:

Eslora:                  177 metros
Manga:                  25 metros
Tonelaje:               18.627 Tn.
Helicópteros:         NO 



Mientras el Buque estaba en Ciudad del Cabo preparándose para cumplir el contrato con Rusia, tuvo problemas con el personal y el combustible, pero además, lo más importante, también con el helicóptero. Todo lo demoró, pudiendo zarpar hacia la Antártida recién el 20 de abril, lo que es extremadamente tarde, porque el campo de hielo se va consolidando y con el agravante de no contar con su helicóptero, que es de suma importancia por sus tareas de exploración de hielos y transporte de personal y carga. 

A mediados de mayo el "MAGDALENA OLDENDORFF llegó a la base, relevó al personal y cumplió con el reabastecimiento, zarpando de regreso el 25 de mayo con 71 científicos y 26 tripulantes. 

Al intentar la salida, encontró un campo de hielo que le impedía hacerlo hacia el norte o el este, por lo que intentó hacerlo hacia el oeste buscando la Caleta Muskegbuska para que le diera protección. Es de destacar que nunca se había navegado por esa zona en esa época del año.

En la Caleta Muskegbuska comenzó con el racionamiento de combustible y víveres, calculando que no llegaba a fin de junio.

Caleta Muskegbuska


El 10 de junio se lanzó la alarma sobre la situación del buque, teniendo repercusión internacional. El MAGDALENA OLDENDORFF estaba aprisionado por los hielos en la latitud 70º 00´S  longitud 01º 00´E.

Ante esta situación la Empresa Oldendorff solicitó ayuda al gobierno argentino, basándose en la experiencia y prestigio de nuestra actividad en la Antártida durante 100 años, y en que nuestros Rompehielos operaron con helicópteros en el Mar de Weddell desde 1955, año en que se habilitó la Base del Ejército "General Belgrano".

Para esa época el "Almirante Irízar" había regresado de la Campaña Antártica de verano el 23 de mayo, el personal estaba don licencia y se habían iniciado las reparaciones para la próxima Campaña.

La posición del MAGDALENA OLDENDORFF con respecto a Buenos Aires y Ciudad del Cabo era:

Buenos Aires - M. OLDENDORFF 5.094 km - 10 días de navegación.

Ciudad del Cabo - M. OLDENDORFF 4.300 km 8 días de navegación.

Al mismo tiempo que inició las coordinaciones con el gobierno argentino, la empresa Oldendorff coordinó con Sudáfrica la participación del buque "AGULHAS", que no es Rompehielos pero tiene su casco reforzado para navegar en la Antártida. 

El gobierno argentino previa consulta de factibilidad ordenó a la Armada planificar la operación, alistarse y establecer un contrato con la Empresa para cubrir los gastos y seguros. 

La Armada alineó en tiempo record  a su Rompehielos A.R.A. "Almirante Irízar"  y a dos Helicóperos H-3 Sea King de la Segunda Escuadrilla Aeronaval de Helicópteros, para zarpar el 26 de junio hacia la zona de operaciones. 





ALISTAMIENTO:

Esta etapa se cumplió entre el 10 y el 15 de junio, durante la cual se completaron los trabajos en ejecución del Rompehielos; se cargó todo el apoyo logístico (víveres y combustible); se convocó al personal que se encontraba de licencia. 

Se alistaron los helicópteros y se convocó al personal de la Escuadrilla; se efectuaron los contratos con la Empresa; se planificó la operación. 




























ALISTAMIENTO DE LA SEGUNDA ESCUADRILLA AERONAVAL DE HELICOPTEROS:

La tarea le fue asignada a esta Unidad que està equipada con helicópteros Sea King H-3.

Se decidió llevar dos helicópteros, un H-3 en configuración de carguero y un SP-H3 equipado con un radar de 60/80 millas de alcance sobre buques de ese tipo.

La decisión de llevar un helicóptero con radar fue importante por el teatro de operaciones, la época del año, con pocas horas de luz y las probables pobres condiciones de visibilidad por falta de luz y nevadas.

Los helicópteros quedaron alistados con 130 hs de vuelos disponibles.

Se fijaron los límites de la operación y se determinó que en caso de efectuarse el rescate de la tripulación del buque, volarían en sección apoyándose mutuamente. 

Se designó como Comandante de la Escuadra Aeronaval Nº 2 al Capitán de Fragata Rafael A. Cornejo Sola; Comandante de la Escuadrilla Capitán de Corbeta Gustavo A. Gomez. 

Como una medida de seguridad de suma importancia la Armada solicitó al Ejército la asignación de una patrulla con experiencia antártica, provista de los elementos necesarios para prestar auxilio en caso de un aterrizaje de emergencia en el hielo, ya que se podían realizar vuelos a máxima distancia (200 mtrs).

La patrulla estaba integrada por el Capitán Carlos Alberto Montenegro; el Sargento ayudante Héctor Homero Perrota; Sargento Ayudante Luis Gonzalez; Sargento Ayudante José Davalos; Sargento Primero Guillermo Aguilera; Sargento Primero Ariel del Valle Robles. 


CONTRATO:

Mientras se cumplía el alistamiento, en Buenos Aires se redactaba el contrato teniendo en cuenta lo siguiente:

El Rompehielos debía estar de regreso el 25 de octubre para alistarse para los relevos de las bases propias durante la Campaña de Verano.


Los objetivos fijados para la operación eran:

- Replegar al personal científico mediante helitransporte.
- Abastecer al Magdalena Oldendorff de combustible y víveres con ambos buques amadrinados (al costado)
- Efectuar tareas de convoyado para sacarlo del campo de hielos.

Establecidas estas premisas se fijó el costo diario del Rompehielos y el de la hora de vuelo de los helicópteros.


PLAN DE OPERACIONES:

Fuerza de Tareas Antártica:

 Vicealmirante Eduardo R. Mlambi

Grupo de Tareas Antártico:

 Capitán de Navío Raúl E. Benmuyal

Unidad de Tareas Antártica:

Rompehielos A.R.A. "Almirante Irízar" Capitán de Fragata Héctor Tavecchia

Jefe del Estado Mayor Especial: Capitán de Fragata Rafael Cornejo Sola

Unidad de Tareas de Helitransporte: 

 Dos Helicópteros Sea King Capitán de Corbeta Gustavo A. Gomez


SITUACION: 

Se establecía el contrato firmado por la Empresa

Se comunicaba que la Empresa había fletado el buque Sudafricano "AGULHAS" con dos helicópteros de la Fuerza Aérea Sudafricana.

Entre los días 10 y 14 de junio el Magdalena Oldendorff derivó 40 millas hacia el W-SW.

La concentración y espesor del hielo se ha ido agravando, esperándose un crecimiento mayor.

Las operaciones con helicópteros estarán condicionadas por la máxima distancia de aproximación.


MISIÒN:

Destacar al Grupo de Tareas Antártico hasta el punto más próximo de la última posición informada del MAGDALENA OLDENDORFF que le permitan las condiciones glaciometeorológicas, a efectos de apreciar la situación en el área y a orden, realizar una o más de las siguientes tareas:

- Reabastecimiento de combustible y/o víveres.
- Recuperar tanto personal no escencial como sea practicable.
- Proveer servicios de Rompehielos y/o remolque en caso de estar en capacidad de crear un canal para el buque.
- Brindar cualquier otra asistencia que sea razonable practicable.


EJECUCIÒN:

Se destacará el Grupo de Tareas Antártico hasta el borde norte de los hielos más próximos a la posición del MAGDALENA OLDENDORFF

En función del estado de los hielos el Grupo de Tareas Antártico ordenará la penetración

Lograda la posición más próxima posible el Grupo de Tareas Antártico tratará de facilitarle el acceso a aguas libres o reabastecimiento y evacuar parte de la dotación.

Se deberán cumplir las instrucciones de operación y los límites establecidos para la operación de helicópteros.

Se establecían las Instrucciones de Coordinación y las de Administración y Logística. 


LA OPERACIÒN:

Como estaba planificado, el Rompehielos A.R.A. "Almirante Irízar zarpó del Puerto de Buenos Aires el 25 de junio de 2002, arribando a Puerto Galván el 27 e iniciando la carga de combustible.

Completada la maniobra, zarpó el 28 embarcando los helicópteros en el canal de salida del Puerto de Bahía Blanca.

Al dejar el canal, el buque tomó una derrota costera hasta la altura del Estrecho de Magallanes.

Desde allí, la intención era tomar un rumbo general hacia el Este, pasando al sur de las Islas Malvinas y de las Orcadas, para luego ir cayendo al sudeste buscando el borde norte del campo de hielo para comenzar la penetración de acuerdo con la información satelital y los vuelos de exploración glaciológica de los helicópteros. 



En la navegación hacia el sur llegó la noticia que el Buque Oceanográfico "AGULHAS" de la Armada Sudafricana había cumplido una operación de rescate del personal desde 197 millas (350 km) con dos helicópteros Puma de la Fuerza Aérea Sudafricana.

Fue una operación de alto riesgo, bien planificada y profesionalmente realizada.

El buque había zarpado de Sudéfica el 17 de junio y el 27 los helicópteros realizaron el primer vuelo evacuando 21 personas, transportando de ida víveres y cigarrillos.

En total cumplieron cuatro vuelos a 197 millas, empleando 3 hs. 20 min entre ida y vuelta.

Estos vuelos se efectuaban entre la salida y puesta del sol, que les daba seis horas de luz.

En los vuelos de ida transportaron víveres y evacuaron en total los 71 cientfíicos rusos y 10 tripulantes, quedando a bordo los 16 tripulantes indispensables para la operación del buque.

Cuando el "IRÌZAR" inició el cruce del Mar de Drake adoptó una derrota ortodrómica (la línea más corta que une dos puntos de la superficie de la tierra); la trayectoria lo llevó a pasar a 20 millas al sur de las Islas Malvinas y continuó con un arrumbamiento general E.S.E. que además. le permitiría correr de popa los temporales frecuentes en esa zona. 

Así el día 7 de julio soportó un temporal con olas de 16 metros que obligaron a refugiarse al sur de las Islas Sandwich (Isla Jorge) sufriendo numerosos destrozos. 



 




En lo que respecta a los helicópteros, debido a la experiencia de tantas campañas, no sufrieron ningún daño por haber estado muy bien trincados y verificados, lo mismo que los cajones de repuestos y herramientas. 

En cuanto a la Tripulación un integrante de la dotación sufrió el aplastamiento de uno de sus pies al caersele encima el expendedor de gaseosas, pero sin sufrir mayores impedimentos



Amainada la tormenta y mientras se reparaban los destrozos, se reinició la navegación, entrando el 8 de julio en el campo de hielo y allí comenzó la actividad de explotación de los helicópteros. 



Además de la información proporcionada por los helicópteros, se contaba con los datos suministrados por el National Ice Center (NIC); el Centro Antártico de la Universidad de Moscú; los satélites propios; el Servicio de Hidrografía Naval.



Los helicópteros cumplieron con la importante tarea de indicar al Rompehielos A.R.A. "Almirante Irízar" el arrumbamiento más conveniente para mantener la derrota general hacia el Magdalena Oldendorff.

En esa épca del año, mes de julio, amanecía a las 10 de la mañana y comenzaba a ponerse el sol a las 14 hs, de modo que se disponía de poco tiempo para realizar las exploraciones, si bien en reiteradas ocasiones se operó con un crepúsculo avanzado. 



A medida que el Rompehielos avanzaba hacia el sur la navegación se hacia más complicada y la velocidad cada vez menor. 



Lo que eran 14 nudos al comenzar la penetración, llegaron a ser cero en algunas oportunidades, como el 14 de julio en que el buque estuvo detenido todo el día.

Foto: 14 de julio 2002  A.R.A. "Almirante Irízar" atrapado detenido entre los hielos.


Normalmente se realizaban dos vuelos por día, estando un helicóptero en apoyo del otro y la patrulla del Ejército preparada ante alguna emergencia. 

Aquí se demostró lo acertado de llevar uno de los helicópteros con radar, ya que permitió mantener la posición del Rompehielos y luego localizar al Magdalena Oldendorff.



Los vuelos de exploración comenzaron el 11 de julio, llevando abordo en muchos de ellos a la glacióloga Beatríz Lorenzo, quien ya tenía experiencia de ocho Campañas Antárticas.

El 17 de julio se produjo el primer sobrevuelo sobre el Magdalena Oldendorff, con gran alegría de su tripulación y también de los helicopterístas.

Foto: Magdalena Oldendorff


El "Irízar comenzó a entrar en la Calea Muskegbuska el 18 de julio por la mañana y a las 15.30 hs llegó a 1,5 millas (5,10 km) del Magdalena Oldendorff, pero debió permanecer a esa distancia por una fuere tormenta de nieve que redujo la visibilidad a cero. 




A primeras horas del 19 de julio, con mejor visibilidad, comenzó la maniobra de aproximación finalizando a las 11 hs cuando los buques quedaron amadrinados (uno al costado del otro)

Foto:  Aproximación al Magdalena Oldendorff - 19 de julio 2002


Cuando los buques quedaron amadrinados comenzó el traspaso de combustible y víveres. Se pasaron 980.000 litros de combustible y 80 toneladas de víveres.



Mientras tanto hubo reuniones del Comandante del Grupo Antártico Capitán de Navío Raúl Benmuyal, el del Rompehielos Capitán Tavecchia, el del Oldendorff Capitán Dicky, el Jefe del Estado Mayor Especial Capitán Cornejo Sola y el veedor de la Empresa señor Klaus Linder para ir planificando y considerando el regreso. 




Se decidiò hacerlo tipo convoyado, es decir el Irizar adelante y el Oldendorff siguiendo las aguas del Rompehielos.

Se continuó la descarga durante todo el 19 y luego de cenar y con meterología favorable se inició el regreso, saliendo de la caleta, que no era una maniobra fácil. 

Como estaba previsto,el Oldendorff navegaba a popa del Irízar, mientras los helicópteros reiniciaban los vuelos de exploración buscando una ruta favorable.

El primer día los buques avanzaron hacia el Este.


Cada vez que el Rompehielos giraba a una u otra banda el Oldendorff se acercaba demasiado por lo que paraba sus máquinas, provocando que se quedara.

Además, el radio de giro del Rompehielos es menor que el del Oldendorff de modo que, durante los giros quedaba trabajo en el hielo, lo que motivaba que el Rompehielos debía regresar a buscarlo para sacarlo de esa situación.



Por otra parte, las aguas que quedaban libres a popa del Rompehielos, rápidamente se llenaban de escombros de hielo y comenzaban a congelarse nuevamente, dada la poca velocidad de navegación.

Esto hizo que en numerosas oportunidades ambos buques quedaran parados hasta 12 horas, con el peligro de no poder salir hasta el verano.


La preocupación del Comandante del Grupo de Tarea era la seguridad del Magdalena Oldendorff; dado que cuando se estableció esta maniobra de convoyado el Estado asumió la responsabilidad sobre el buque y su tripulación.


Con la información satelital y los vuelos de los helicópteros se intentó navegar hacia el norte para llegar a aguas libres, pero no se podía avanzar. 

El 21 de julio, en esta situación se apreció que no podrían salir los dos buques.

Se destacó un helicóptero al Magdalena Oldendorff para trasladar al Rompehielos a su Capitán y reunidos con el representante de la Empresa y el Comandante del Grupo y del Irízar, analizaran la situación y tomaran una decisión.

Finalmente se decidió volver a la caleta Muskegbuska donde es estaría al reparo de los hielos.

El 29 de julio regresaron a la caleta donde se pasaron más combustible y víveres. Además se destacó al Teniente de Navío Médico Juan Carlos Campana, quien se ofreció voluntario para quedarse en el Magdalena Oldendorff para acompañar y asistir a los 14 hombres que quedarían abordo, ya que se desembarcaban dos hombres que no eran imprescindibles.


Ese mismo día se evaluó la posibilidad de que el Irízar permaneciera junto al Magdalena Oldendorff hasta que la situación mejorara, pero el Rompehielos debía estar en Buenos Aires el 25 de octubre para alistarse para volver a la Antártida en la siguiente Campaña Antártica 2002/2003.


De acuerdo con el Capitán del Magdalena Oldendorff y el representante de la empresa, se decidió dejar al buque en esa caleta protegida con combustible y víveres hasta el verano y con el médico para atender cualquier emergencia.

El Rompehielos iniciaría el regreso el 31 de julio, primeramente hacia el Este y luego hacia el Norte, hasta llegar a aguas libres.

Se reiniciaron los vuelos glaciológicos el 30 de julio y se los continuó hasta el 2 de agosto, proveyendo información del campo de hielo para buscar la mejor derrota de salida.

Es de hacer notar que después de cada vuelo se labraba un acta firmada por el Comandante del Grupo  el representante de la Empresa a efectos de los reintegros de los gastos por horas de vuelo.

La derrota de salida fue parecida a la de entrada y el 18 de agosto de 2002 el Rompehielos "Almirante Irízar" arribó al Puerto de Buenos Aires con un helicóptero en su plataforma de popa.

A su encuentro fue a recibirlo la Corbeta "Uruguay" quien rescatara en el año 1903 a los integrantes de la Expedición Sueca de Otto Nordensjhöld.  

Foto: Rompehielos "Almirante Irízar" y la Corbeta "Uruguay" en el Puerto de Buenos Aires


La Operación de Rescate del Magdalena Oldendorff fue planeada y alistada en un corto plazo; que se tomaron todos los recaudos para la efectiva operatividad de los medios; que el personal destacado, dotado de capacidad y con el adiestramiento adecuado, recibió las instrucciones pertinentes para el cumplimiento de esta operación, que no se desconocían las dificultades y riesgos que la Antártida les opondría en esta época del año; que en todos los aspectos se privilegió la vida del personal y que la misma fue realizada con profesionalismo y eficacia. 

La Armada forma a sus hombres para el desempeño de distintas funciones durante su carrera, pero además, les crea conciencia del deber y de que "un hombre de mar no abandona a otro hombre de mar en situaciones de peligro". 


VIDEO DEL RESCATE REALIZADO POR UNO DE SUS TRIPULANTES:

                                    Primera Parte


                                Segunda Parte

NOTA: 

El médico Teniente de Navío Médico Juan Carlos Campana, debió aplazar su casamiento, cuya fecha era en el mes de octubre, dado a su condición voluntaria de quedarse abordo del Magdalena Oldendorff. Cuando el Capitán de Navío Raúl Benmuyal le preguntó por qué quiso ser voluntario el Teniente de Navío Médico Campana le respondió "...porque se casaba". 


FOTOS:  Capitán de Navío RE Raúl Benmuyal


TEXTO:   

- "Historia de la Aviación Naval Argentina"  Tomo IV. Volúmen 2. Buenos Aires 2012
Relatos del Capitán de Navío Raúl Benmuyal en las Jornadas de Disertación sobre la Antártida. Escobar. Provincia de Bs. As. Septiembre 2013


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